Un escrito que lo demuestra es el de a continuación:
La selectividad se acerca
y esto conlleva: nervios, estrés, aglomeración de apuntes, pasar largas horas
estudiando en la biblioteca, asistir a clases para repasar… Será el examen definitivo para poder optar
por nuestros sueños y por nuestro futuro. Esta palabra que tanto asusta
“Futuro” y con la que nos preguntamos: ¿Cómo será nuestra nueva etapa? ¿Nos
gustará la carrera? ¿Los amigos seguirán? Y el profesorado,¿como será?
A estas alturas
deberíamos tener elegida la carrera que queremos estudiar y la universidad a la
que queremos ir. Toda una vida pensando
que queremos estudiar y que queremos ser, para decidir y apostarlo todo en un
año. Y cuando crees tenerlo claro, aparecen distintas universidades que
intentan convencer y todas las decisiones tomadas se vuelven dudas.
A todo esto se suma que
es el último año como estudiantes de instituto. Sin duda alguna el más corto
pero el más intenso y duro. Pronto
llegará la hora de la despedida, de dejarlo todo atrás y emprender el camino, solo
pero con fuerza y ganas.